Denebola
Alfista Consagrado
PRUEBA Y REPORTAJE, ALFA ROMEO GIULIETTA MY 2014
INDICE DE CONTENIDOS:
1-INTRODUCCIÓN.
2-MODELO Y MOTORIZACIÓN.
3-ACABADO EXTERIOR PACK SPORTIVA Y PACK PREMIUM.
4-ACABADO INTERIOR PACK SPORTIVA Y PACK PREMIUM.
5-DINÁMICA, CONFORT Y PRESTACIONES.
6-CONCLUSIÓN FINAL.
1-INTRODUCCIÓN:
Tratad de leer el reportaje cómo la opinión de un compañero, no hay certezas absolutas, ni mentiras camufladas.
He intentado ser lo más veraz posible, pero como en todos los artículos, el gusto personal juega alguna que otra mala pasada, así que es posible que estéis de acuerdo con parte del texto y en otros aspectos no tanto.
Mi intención es mostrar el coche tal cual es, cómo si tuvieseis la oportunidad de tener uno delante, mostrando sus detalles, virtudes y defectos. Algo que sirva de orientación para futuros propietarios y de entretenimiento para los alfistas, en especial de los Giuliettistas, colectivo en el que me integro con el mayor de los orgullos. Sin más, aquí está el bicho:
¿Se puede comprar un Alfa Romeo siguiendo los dictámenes de la razón y no los del corazón?
A priori, este topicazo de la marca, puede resultar una pregunta bastante simple de contestar, alguno de vosotros quizá lo haya hecho ya, pero si lo pensamos detenidamente, ¿Seríamos capaces de dar una respuesta lógica? No lo creo.
La publicidad es un depredador insaciable. Vaga por cualquier medio conocido; Prensa escrita, televisión, radio, nada escapa a su poder y control. Nos vemos bombardeados a diario por un sin fin de ofertas, lustros de garantía adicional, brillantes carrocerías que reflejan de manera sinuosa el cielo nocturno de una vibrante y moderna urbe, acabados sport, ligeras llantas de dimensiones grotescas, pantallas táctiles e innecesarios aparatos de info entretenimiento... Todo preparado para atraer al comprador cual polilla que se adhiere al fluorescente de una terraza en verano.
En ese maremágnum de estímulos que nos invade a la hora de adquirir un vehículo nuevo, ¿Qué lugar ocupa una marca que posee dos modelos (acepten mis disculpas, Señor 4C y su Excelencia Disco Volante), con un cierto bagaje de años en el mercado, sin rumbo aparente, sin opciones y con el cliché y perenne estigma de la mala gestión postventa y fiabilidad?
Un Giulietta, depósito lleno y el horizonte. No se puede pedir más.
El tío de la casa por el tejado. Así de lapidaria suena mi madre cada vez que decido hacer algo.
Jamás he tenido un coche con más de cuatro asientos o dos puertas. Pasé de un precioso Fiat Coupé a mi actual y flamante Alfa Romeo Spider 939, pero incluso en la infinita ignorancia y nula previsión de acontecimientos, soy plenamente consciente que un descapotable, gasolina y biplaza, no puede (ni debe) abarcar todas las vicisitudes y necesidades del día a día en un domicilio medianamente normal.
El objetivo y las premisas son claras: Vehículo diesel, de potencia respetable, cómodo y espacioso, con un maletero decente, y cierto carácter deportivo, si es que a un coche impulsado por el combustible del diablo se le puede adjetivar con la palabra "deportivo".
Sobre la mesa, la extensa e inabarcable gama de Alfa Romeo. ¿Qué sería del alfista sin esa figura retórica llamada ironía?
Volkswagen Golf (el Rey de reyes), Mazda 3 (la gran sorpresa), Mercedes clase A (no consigo estar de acuerdo con su calidad-precio), Volvo (si, pero no), Ford Focus (esperaba más, han radicalizado el diseño), BMW serie 1 (se ven demasiados, lo veo muy genérico)... Probados todos, sopesados, comparados, discutidos. Les falta algo y tienen dos serios problemas:
El primero y más sui generis es el diseño exterior. Aquí entono el mea culpa, no acaba de llamar mi atención ninguno de ellos (y lo he intentado). El segundo problema, a mi entender insalvable, es que en casa no soy el único alfista. Mi señora lleva años enamorada del Alfa Romeo Giulietta Blanco Ghiaccio.
¿Por qué si al Giulietta y no a los demás? Pues porque en casa entran las cosas por los ojos, y prima más el sentimiento o el placer visual que la funcionalidad o la razón. Pero este Giulietta a pesar de llegar por que gusta, lo tiene que hacer con cabeza, de ahí la pregunta con la que daba comienzo el reportaje.
Dicen que es su peor cara. Permitidme que lo dude.
2-MODELO Y MOTORIZACIÓN:
Alfa Romeo Giulietta 2.0 JTDm2
Potencia: 150cv a 3750rpm, 380Nm de par a 1750rpm.
Alimentación: Multijet 2, inyección directa 1600 bares, turbocompresor e intercooler.
Ruedas: Llanta 18" Turbina oscura, Dunlop SP SPORT MAXX TT 225/40 ZR18 92w.
Frenos: Sobredimensionados Brembo Pack Sportiva.
Velocidad máx: 210Km/h.
Aceleración (0-100km/h): 8´8 s
Equipamiento: Sensor de aparcamiento trasero, climatizador bizona, apoyabrazos delantero, marco lunas cromado, escape doble, cruise control, sensor de lluvia y luminosidad, espejo interior electrocromado.
Pack SPORTIVA: Tapas de retrovisor y manillas satinadas, faros e interior con acabado oscuro, salpicadero del Quadrifoglio Verde, faldones laterales, suspensión deportiva, volante de piel con costuras blancas, pedales deportivos, lunas traseras tintadas, paso de puerta QV, pinzas de freno rojas, tapicería en piel y alcántara.
Pack PREMIUM: Lavafaros telescópicos, faros bi-xenón con Adaptative Frontlight System, techo practicable, equipo HiFi Bose con 9 altavoces y subwoofer.
Pack CONFORT (selección): Regulación en altura del asiento de pasajero y reposabrazos trasero y tercer reposacabezas. Radio navegador 6´5".
Ni el más potente, ni el más flojo... Podría haberme dejado seducir por el TCT, los guantes de cuero y esa falsa sensación que nos imbuyen las levas a lo Fórmula 1, pero hay que callejear, que aparcar, arrancar y parar constantemente, y el sobreprecio junto al hándicap del consumo declinaron la opción más lógica para cualquier Alfista: La más potente.
Nos queda pues el nuevo 2.0 jtdm de segunda serie con 150cv y 380Nm (valor de par más alto de toda la gama, por encima de cualquier gasolina, incluido el QV).
He leído que por ahí dentro trabajan duro unos pequeños cachivaches, enanitos o cómo queráis llamarlos, inyectores de nueva generación, servo válvula hidráulica, 8 inyecciones por ciclo, un reno y varios pajaritos azules que ayudan a Blancanieves a limpiar los platos mientras entonan una edulcorada cantinela... Da igual.
Lo más importante de toda esa tecnología, (que no se ve cuando coges el coche para ir a trabajar), es que funciona, y lo hace bien. Con esto se ha mejorado tanto la potencia y el par motor con respecto al anterior jtdm (que generaba 140cv), como el consumo, o las dichosas y tan en boga emisiones de CO2 y NOx.
No haré ninguna otra reseña al motor hasta que llegue al apartado de Dinámica y Prestaciones, y es que merece la pena hablar de ello por separado.
3-ACABADO EXTERIOR PACK SPORTIVA Y PACK PREMIUM:
No creo que exista una manera fina o delicada de abordar este tema.
Un modesto investigador de barrio, que dedique su jornada a los asuntos de cuernos, bajas laborales o estafas a seguros, puede resultar tanto o más atractivo que cualquiera de los actores que haya encarnado el papel de James Bond. Una cartera pudiente se permitiría el lujo de vestir trajes de Anthony Sinclair, Brioni o Tom Ford, darse una vuelta por la zapatería británica Church´s y calzarse unos Crockett & Jones o algo de John Lobb, quizá un Rolex Submariner o un Omega Seamaster en la muñeca, todo ello, claro está, con unas bonitas gafas firmadas por Persol.
Y sí, puede que tu trabajo sea menos glamuroso que el del agente 007, pero caramba, que buena pinta tienes... Eso es el acabado Sportiva, un disfraz de algo que no eres. Un tremendo ejercicio de diseño por parte de Alfa Romeo, y un grandioso homenaje al Giulietta QV, que presta su fondo de armario para que cualquier diesel de medio pelo, pueda imaginar que acaba de salvar el mundo de los maléficos planes comunistas de una república bananera.
El "facelift" del modelo 2014 se ciñe a un escueto cambio en la calandra y unos pequeños cromados para delimitar los faros antiniebla. Estos elementos, los perfiles de las ventanillas, algunos añadidos del Pack (como los retrovisores en cromo satinado) y el níveo Ghiaccio de la carrocería, evocan con ternura a las Giuliettas de hace décadas, con sus maravillosos blancos nucleares y abundantes piezas de metal pulido.
En el catálogo MY2014, Alfa Romeo define al Giulietta como berlina, otros claramente engloban el vehículo en el segmento C, algunos lo tratan como un hatchback o quizá un cinco puertas, enmascarado de coupé. Lo cierto es que intenta ser la alternativa de Alfa al trono del superventas Golf, aunque a la hora de la verdad no haya conseguido batirse el cobre con el Rey, cayendo herido de muerte en una zanja a las puertas del castillo. Y no será por carencia de arrestos y coraje para codearse con la alta alcurnia del segmento. Valores le sobran y calidad también.
El coche es bonito pero "mazacote", lo veo generoso en proporciones, con un capó bastante alto (se ha perdido el acerado frontal del 147 al que sustituye) y unas generosas curvas que se agradecen en el tercio trasero del vehículo, haciéndolo musculoso y soberbio. En lo que concierne al diseño, que decir sin que se le vea el plumero a un alfista, pues que llama mucho la atención, tanto en movimiento como parado. Muchos conductores y transeúntes siguen sin identificar el modelo, no saben si es nuevo o lleva años en el mercado, les gusta lo que ven, pero no lo reconocen. Una lástima.
Exteriormente, las líneas fluyen de manera armónica, con un largo nervio que comienza en el paso de rueda delantero y termina confluyendo en las espectaculares y distintivas ópticas traseras.
Puertas, faldones, taloneras, libres de protecciones... El Giulietta es un coche condenado a la abolladura, a ser marcado como las reses. Toda la carrocería queda a merced del prójimo y la habilidad a la hora de encontrar aparcamiento del propietario.
Me ha resultado chocante el reproche de amigos y familiares, increpándome hasta la saciedad el error cometido al comprar de nuevo un vehículo de dos puertas. El asombro y las mandíbulas pendulantes fueron las únicas respuestas a la "mágica" aparición de sendas puertas traseras, con sus tiradores bien integrados y escondidos en el marco de las ventanillas.
Las enormes y preciosistas llantas turbina oscura de 18 pulgadas, los frenos firmados por Brembo con sus clásicas pinzas rojas, unas elegantes taloneras, las lunas traseras tintadas, los faros con acabado oscuro o las tapas de los retrovisores y manillas satinadas, son los aderezos que utiliza el Pack Sportiva para potenciar el carácter y dar un sonrojante impacto visual al Giulietta. Parece algo serio, grande, capaz de comerse a cualquier adversario. Luce, y mucho, manteniendo la apariencia de ser una versión potenciada de un utilitario, un "postureo elegante", si se me permite la expresión. Y es esa mezcla de sutileza y brutalidad la que llama tanto la atención del que lo mira.
La doble y cromada salida de escape, da una sonora bofetada al que pierde el tiempo en dar una vueltecita al coche para observar los detalles. Es un perfecto broche a la voluptuosa trasera del Giulietta, y un toque a tener en cuenta junto al spoiler, la singularidad de las ópticas posteriores y el distintivo acabado trapezoidal de la luna trasera.
Lo del gusto es algo muy personal, y seré sincero, la verdad es que en un principio me seducía muchísimo más el concepto del Alfa Romeo Mito (en especial su acabado QV), pero el roce hace el cariño, y cuanto más admiro (esto no se ve, se admira) la estética general y su conjunto como un "todo", más convencido estoy del acierto que tuvo Alfa Romeo a la hora de darle puerta al 147. Y no os llevéis las manos a la cabeza, tengo un restyling en color rosso justo delante de mi plaza de aparcamiento, y el Giulietta es bastante más equilibrado y bello que su antecesor. Repito que, el gusto es personal.
Para no dejar huérfano al Pack Sportiva, los elementos exteriores del Pack PREMIUM hacen su aparición, abriendo los brazos cual abnegada madre y dándonos de mamar de la teta del "lujo". Ésta al fin y al cabo, no deja de ser una siliconada ubre, injertada por los cirujanos del taller para darle un mejor aspecto a todo.
Unos lavafaros telescópicos, perfectamente integrados en el paragolpes delantero, unidos a unos bi-xenón dotados del espectacular y efectivo sistema Frontlight System que mueve los mismos acompañando el movimiento del volante, de este modo apuntan el haz luminoso en la dirección de la curva, para que podamos ver y anticiparnos a la niña de la "ídem". Esta función, tiene la particularidad de poder desactivarse desde la consola central del vehículo.
El espectacular techo acristalado, de apertura automatizada con varias posiciones, da empaque, pudiendo ser disfrutado por todos los ocupantes, tanto en plazas delanteras como traseras. Acostumbrado a viajar en un Spider, el techo practicable en carretera es tremendamente ruidoso (incluso con el pequeño paravientos que se acciona al mismo tiempo que abrimos el cristal), así que casi mejor lo dejamos para callejear, y en autovía nos dedicamos a posicionarlo en una apertura tipo "spoiler", muchísimo más agradable y permisiva para el conductor. Y aclaro para el que no lo haya entendido: Es mucho más placentero y cómodo carecer de techo que tener un agujero en mitad del mismo.
INDICE DE CONTENIDOS:
1-INTRODUCCIÓN.
2-MODELO Y MOTORIZACIÓN.
3-ACABADO EXTERIOR PACK SPORTIVA Y PACK PREMIUM.
4-ACABADO INTERIOR PACK SPORTIVA Y PACK PREMIUM.
5-DINÁMICA, CONFORT Y PRESTACIONES.
6-CONCLUSIÓN FINAL.
1-INTRODUCCIÓN:
Tratad de leer el reportaje cómo la opinión de un compañero, no hay certezas absolutas, ni mentiras camufladas.
He intentado ser lo más veraz posible, pero como en todos los artículos, el gusto personal juega alguna que otra mala pasada, así que es posible que estéis de acuerdo con parte del texto y en otros aspectos no tanto.
Mi intención es mostrar el coche tal cual es, cómo si tuvieseis la oportunidad de tener uno delante, mostrando sus detalles, virtudes y defectos. Algo que sirva de orientación para futuros propietarios y de entretenimiento para los alfistas, en especial de los Giuliettistas, colectivo en el que me integro con el mayor de los orgullos. Sin más, aquí está el bicho:
¿Se puede comprar un Alfa Romeo siguiendo los dictámenes de la razón y no los del corazón?
A priori, este topicazo de la marca, puede resultar una pregunta bastante simple de contestar, alguno de vosotros quizá lo haya hecho ya, pero si lo pensamos detenidamente, ¿Seríamos capaces de dar una respuesta lógica? No lo creo.
La publicidad es un depredador insaciable. Vaga por cualquier medio conocido; Prensa escrita, televisión, radio, nada escapa a su poder y control. Nos vemos bombardeados a diario por un sin fin de ofertas, lustros de garantía adicional, brillantes carrocerías que reflejan de manera sinuosa el cielo nocturno de una vibrante y moderna urbe, acabados sport, ligeras llantas de dimensiones grotescas, pantallas táctiles e innecesarios aparatos de info entretenimiento... Todo preparado para atraer al comprador cual polilla que se adhiere al fluorescente de una terraza en verano.
En ese maremágnum de estímulos que nos invade a la hora de adquirir un vehículo nuevo, ¿Qué lugar ocupa una marca que posee dos modelos (acepten mis disculpas, Señor 4C y su Excelencia Disco Volante), con un cierto bagaje de años en el mercado, sin rumbo aparente, sin opciones y con el cliché y perenne estigma de la mala gestión postventa y fiabilidad?
Un Giulietta, depósito lleno y el horizonte. No se puede pedir más.
El tío de la casa por el tejado. Así de lapidaria suena mi madre cada vez que decido hacer algo.
Jamás he tenido un coche con más de cuatro asientos o dos puertas. Pasé de un precioso Fiat Coupé a mi actual y flamante Alfa Romeo Spider 939, pero incluso en la infinita ignorancia y nula previsión de acontecimientos, soy plenamente consciente que un descapotable, gasolina y biplaza, no puede (ni debe) abarcar todas las vicisitudes y necesidades del día a día en un domicilio medianamente normal.
El objetivo y las premisas son claras: Vehículo diesel, de potencia respetable, cómodo y espacioso, con un maletero decente, y cierto carácter deportivo, si es que a un coche impulsado por el combustible del diablo se le puede adjetivar con la palabra "deportivo".
Sobre la mesa, la extensa e inabarcable gama de Alfa Romeo. ¿Qué sería del alfista sin esa figura retórica llamada ironía?
Volkswagen Golf (el Rey de reyes), Mazda 3 (la gran sorpresa), Mercedes clase A (no consigo estar de acuerdo con su calidad-precio), Volvo (si, pero no), Ford Focus (esperaba más, han radicalizado el diseño), BMW serie 1 (se ven demasiados, lo veo muy genérico)... Probados todos, sopesados, comparados, discutidos. Les falta algo y tienen dos serios problemas:
El primero y más sui generis es el diseño exterior. Aquí entono el mea culpa, no acaba de llamar mi atención ninguno de ellos (y lo he intentado). El segundo problema, a mi entender insalvable, es que en casa no soy el único alfista. Mi señora lleva años enamorada del Alfa Romeo Giulietta Blanco Ghiaccio.
¿Por qué si al Giulietta y no a los demás? Pues porque en casa entran las cosas por los ojos, y prima más el sentimiento o el placer visual que la funcionalidad o la razón. Pero este Giulietta a pesar de llegar por que gusta, lo tiene que hacer con cabeza, de ahí la pregunta con la que daba comienzo el reportaje.
Dicen que es su peor cara. Permitidme que lo dude.
2-MODELO Y MOTORIZACIÓN:
Alfa Romeo Giulietta 2.0 JTDm2
Potencia: 150cv a 3750rpm, 380Nm de par a 1750rpm.
Alimentación: Multijet 2, inyección directa 1600 bares, turbocompresor e intercooler.
Ruedas: Llanta 18" Turbina oscura, Dunlop SP SPORT MAXX TT 225/40 ZR18 92w.
Frenos: Sobredimensionados Brembo Pack Sportiva.
Velocidad máx: 210Km/h.
Aceleración (0-100km/h): 8´8 s
Equipamiento: Sensor de aparcamiento trasero, climatizador bizona, apoyabrazos delantero, marco lunas cromado, escape doble, cruise control, sensor de lluvia y luminosidad, espejo interior electrocromado.
Pack SPORTIVA: Tapas de retrovisor y manillas satinadas, faros e interior con acabado oscuro, salpicadero del Quadrifoglio Verde, faldones laterales, suspensión deportiva, volante de piel con costuras blancas, pedales deportivos, lunas traseras tintadas, paso de puerta QV, pinzas de freno rojas, tapicería en piel y alcántara.
Pack PREMIUM: Lavafaros telescópicos, faros bi-xenón con Adaptative Frontlight System, techo practicable, equipo HiFi Bose con 9 altavoces y subwoofer.
Pack CONFORT (selección): Regulación en altura del asiento de pasajero y reposabrazos trasero y tercer reposacabezas. Radio navegador 6´5".
Ni el más potente, ni el más flojo... Podría haberme dejado seducir por el TCT, los guantes de cuero y esa falsa sensación que nos imbuyen las levas a lo Fórmula 1, pero hay que callejear, que aparcar, arrancar y parar constantemente, y el sobreprecio junto al hándicap del consumo declinaron la opción más lógica para cualquier Alfista: La más potente.
Nos queda pues el nuevo 2.0 jtdm de segunda serie con 150cv y 380Nm (valor de par más alto de toda la gama, por encima de cualquier gasolina, incluido el QV).
He leído que por ahí dentro trabajan duro unos pequeños cachivaches, enanitos o cómo queráis llamarlos, inyectores de nueva generación, servo válvula hidráulica, 8 inyecciones por ciclo, un reno y varios pajaritos azules que ayudan a Blancanieves a limpiar los platos mientras entonan una edulcorada cantinela... Da igual.
Lo más importante de toda esa tecnología, (que no se ve cuando coges el coche para ir a trabajar), es que funciona, y lo hace bien. Con esto se ha mejorado tanto la potencia y el par motor con respecto al anterior jtdm (que generaba 140cv), como el consumo, o las dichosas y tan en boga emisiones de CO2 y NOx.
No haré ninguna otra reseña al motor hasta que llegue al apartado de Dinámica y Prestaciones, y es que merece la pena hablar de ello por separado.
3-ACABADO EXTERIOR PACK SPORTIVA Y PACK PREMIUM:
No creo que exista una manera fina o delicada de abordar este tema.
Un modesto investigador de barrio, que dedique su jornada a los asuntos de cuernos, bajas laborales o estafas a seguros, puede resultar tanto o más atractivo que cualquiera de los actores que haya encarnado el papel de James Bond. Una cartera pudiente se permitiría el lujo de vestir trajes de Anthony Sinclair, Brioni o Tom Ford, darse una vuelta por la zapatería británica Church´s y calzarse unos Crockett & Jones o algo de John Lobb, quizá un Rolex Submariner o un Omega Seamaster en la muñeca, todo ello, claro está, con unas bonitas gafas firmadas por Persol.
Y sí, puede que tu trabajo sea menos glamuroso que el del agente 007, pero caramba, que buena pinta tienes... Eso es el acabado Sportiva, un disfraz de algo que no eres. Un tremendo ejercicio de diseño por parte de Alfa Romeo, y un grandioso homenaje al Giulietta QV, que presta su fondo de armario para que cualquier diesel de medio pelo, pueda imaginar que acaba de salvar el mundo de los maléficos planes comunistas de una república bananera.
El "facelift" del modelo 2014 se ciñe a un escueto cambio en la calandra y unos pequeños cromados para delimitar los faros antiniebla. Estos elementos, los perfiles de las ventanillas, algunos añadidos del Pack (como los retrovisores en cromo satinado) y el níveo Ghiaccio de la carrocería, evocan con ternura a las Giuliettas de hace décadas, con sus maravillosos blancos nucleares y abundantes piezas de metal pulido.
En el catálogo MY2014, Alfa Romeo define al Giulietta como berlina, otros claramente engloban el vehículo en el segmento C, algunos lo tratan como un hatchback o quizá un cinco puertas, enmascarado de coupé. Lo cierto es que intenta ser la alternativa de Alfa al trono del superventas Golf, aunque a la hora de la verdad no haya conseguido batirse el cobre con el Rey, cayendo herido de muerte en una zanja a las puertas del castillo. Y no será por carencia de arrestos y coraje para codearse con la alta alcurnia del segmento. Valores le sobran y calidad también.
El coche es bonito pero "mazacote", lo veo generoso en proporciones, con un capó bastante alto (se ha perdido el acerado frontal del 147 al que sustituye) y unas generosas curvas que se agradecen en el tercio trasero del vehículo, haciéndolo musculoso y soberbio. En lo que concierne al diseño, que decir sin que se le vea el plumero a un alfista, pues que llama mucho la atención, tanto en movimiento como parado. Muchos conductores y transeúntes siguen sin identificar el modelo, no saben si es nuevo o lleva años en el mercado, les gusta lo que ven, pero no lo reconocen. Una lástima.
Exteriormente, las líneas fluyen de manera armónica, con un largo nervio que comienza en el paso de rueda delantero y termina confluyendo en las espectaculares y distintivas ópticas traseras.
Puertas, faldones, taloneras, libres de protecciones... El Giulietta es un coche condenado a la abolladura, a ser marcado como las reses. Toda la carrocería queda a merced del prójimo y la habilidad a la hora de encontrar aparcamiento del propietario.
Me ha resultado chocante el reproche de amigos y familiares, increpándome hasta la saciedad el error cometido al comprar de nuevo un vehículo de dos puertas. El asombro y las mandíbulas pendulantes fueron las únicas respuestas a la "mágica" aparición de sendas puertas traseras, con sus tiradores bien integrados y escondidos en el marco de las ventanillas.
Las enormes y preciosistas llantas turbina oscura de 18 pulgadas, los frenos firmados por Brembo con sus clásicas pinzas rojas, unas elegantes taloneras, las lunas traseras tintadas, los faros con acabado oscuro o las tapas de los retrovisores y manillas satinadas, son los aderezos que utiliza el Pack Sportiva para potenciar el carácter y dar un sonrojante impacto visual al Giulietta. Parece algo serio, grande, capaz de comerse a cualquier adversario. Luce, y mucho, manteniendo la apariencia de ser una versión potenciada de un utilitario, un "postureo elegante", si se me permite la expresión. Y es esa mezcla de sutileza y brutalidad la que llama tanto la atención del que lo mira.
La doble y cromada salida de escape, da una sonora bofetada al que pierde el tiempo en dar una vueltecita al coche para observar los detalles. Es un perfecto broche a la voluptuosa trasera del Giulietta, y un toque a tener en cuenta junto al spoiler, la singularidad de las ópticas posteriores y el distintivo acabado trapezoidal de la luna trasera.
Lo del gusto es algo muy personal, y seré sincero, la verdad es que en un principio me seducía muchísimo más el concepto del Alfa Romeo Mito (en especial su acabado QV), pero el roce hace el cariño, y cuanto más admiro (esto no se ve, se admira) la estética general y su conjunto como un "todo", más convencido estoy del acierto que tuvo Alfa Romeo a la hora de darle puerta al 147. Y no os llevéis las manos a la cabeza, tengo un restyling en color rosso justo delante de mi plaza de aparcamiento, y el Giulietta es bastante más equilibrado y bello que su antecesor. Repito que, el gusto es personal.
Para no dejar huérfano al Pack Sportiva, los elementos exteriores del Pack PREMIUM hacen su aparición, abriendo los brazos cual abnegada madre y dándonos de mamar de la teta del "lujo". Ésta al fin y al cabo, no deja de ser una siliconada ubre, injertada por los cirujanos del taller para darle un mejor aspecto a todo.
Unos lavafaros telescópicos, perfectamente integrados en el paragolpes delantero, unidos a unos bi-xenón dotados del espectacular y efectivo sistema Frontlight System que mueve los mismos acompañando el movimiento del volante, de este modo apuntan el haz luminoso en la dirección de la curva, para que podamos ver y anticiparnos a la niña de la "ídem". Esta función, tiene la particularidad de poder desactivarse desde la consola central del vehículo.
El espectacular techo acristalado, de apertura automatizada con varias posiciones, da empaque, pudiendo ser disfrutado por todos los ocupantes, tanto en plazas delanteras como traseras. Acostumbrado a viajar en un Spider, el techo practicable en carretera es tremendamente ruidoso (incluso con el pequeño paravientos que se acciona al mismo tiempo que abrimos el cristal), así que casi mejor lo dejamos para callejear, y en autovía nos dedicamos a posicionarlo en una apertura tipo "spoiler", muchísimo más agradable y permisiva para el conductor. Y aclaro para el que no lo haya entendido: Es mucho más placentero y cómodo carecer de techo que tener un agujero en mitad del mismo.