Re:NOTICIAS FIAT-CHRYSLER: ¿MV AGUSTA PODRÍA ESTAR BAJO LA ÉGIDA DE ALFA?
¿Quiere comprar Fiat un pedacito de MV Agusta?
¿Es esta la historia de la "vendetta" de Lapo Elkann por no haber podido comprar Ducati? italiana, que tenía un acuerdo de patrocinio y colaboración con AMG, buscaba un nuevo propietario para salirse de la marca de las dos ruedas. La había saneado internamente.
Y es que Ducati, como tantas otras firmas motociclístas, las había pasado de todos los colores. La compañía, metida en serios problemas económicos, había caído a mediados de los ochenta en manos de Cagiva, la firma de Claudio Castiglioni. Si bien sus productos funcionaban, sus cuentas y su control de calidad no.
Así, en 1996 la compañía pasó a manos de una compañía de capital riesgo norteamericana, Texas Pacific Group. TPG mejoraba un poco el rendimiento de Ducati (las míticas 916 desarrolladas bajo mandato de Cagiva ayudaban), pero la firma mantenía su bajo rendimiento económico. Para 2005 entraba en escena la citada Investindustrial, que devolvía la propiedad de la compañía a Italia.
Tras un programa de inversiones, calidad, y una reorganización de los recursos, Ducati pasaba a convertirse en una gallina de huevos de oro, con rendimiento económico, una imagen de marca sólida, y problemas de calidad solucionados.
Con la compañía limpia de polvo y paja, y en plena forma, como buena compañía de capital riesgo, Investindustrial quería sacar tajada a su operación. Cuando salió al mercado a buscar propietarios, rápidamente apareció en escena VAG, que ya había intentado comprar Ducati de manos de TPG.
¿Por qué VAG quería Ducati? Una razón sencilla: Ferdinand Piech, el "nietísimo" de Ferdinand Porsche, quería desde hacía años una marca de motos en el establo de VAG.
Cuando Investindustrial tenía ya un acuerdo con VAG, Lapo Elkann aseguró que "sería una pena que Ducati cayera en manos no italianas", pero su oferta no llegaba a los talones de la cifra de VAG
Habían tonteado con la idea de recuperar NSU para el mundo de las dos ruedas, pero era una inversión demasiado elevada en un mercado completamente desconocido. Así que, como ocurriera con Lamborghini y Bugatti (y Alfa Romeo, aunque con esta no se salió con la suya), Piech ordenó a los suyos sacar la chequera y hacerse con Ducati, previa oferta de 680 millones de euros.
Y es aquí donde entra en escena Fiat, y más concretamente Lapo Elkann. El "otro nietísimo", en este caso de Giovanni Agnelli, fundador de Fiat, se echaba las manos a la cabeza: Ducati era y es un símbolo de Italia, y no podía ir a parar a manos germanas.
"Si hace falta, pondremos nosotros una oferta sobre la mesa", dijo Lapo. Pero los 680 millones de euros propuestos por VAG, incluyendo un plan industrial de inversiones sólido, eran demasiado para lo que Elkann, Exor y Fiat podían ofrecer.
Así Ducati, "la Ferrari de las motos" se iba a manos de Audi, que técnicamente es su propietaria dentro del conglomerado de VAG.
Pero parece que a los Elkann (Lapo y su hermano John), se les quedó una espinita clavada, y aquí es donde entra la historia de MV Agusta.
Tras perder Claudio Castiglione el control de Ducati, al venderla a TPG, él mismo y su diseñador Massimo Tamburini hicieron realidad un proyecto que llevaban cociendo desde 1991: Recuperar el nombre comercial MV Agusta, que habían adquirido en 1991. En 1997, cuando ya no tenían el control de Ducati (como te hemos comentado arriba, la vendían en 1996), se lanzaba al mercado la primera MV Agusta F4, un proyecto que había pasado seis años en desarrollo, incluyendo inversiones en pagar a Ferrari el diseño de una culata de cinco válvulas por cilindro, que luego no se emplearía en el modelo de producción.
Si bien la F4 (que mejorada se sigue vendiendo), fue un éxito a ojos de la crítica, comercialmente e industrialmente el proyecto dejaba mucho que desear a nivel de resultados. Para 1999, Cagiva estaba metida en tales líos financieros que MV Agusta pasó a ser la marca principal del emporio de Castiglione, que contaba con las marcas comerciales MV Agusta, Cagiva y Husqvarna.
Sin capacidad de respuesta a unas deudas crecientes y sin las ventas tan necesarias para sacar a la compañía de sus problemas, en 2004 aparecía Proton, la firma malasia propietaria de Lotus, y compraba todo el paquete por 70 millones de euros (10 veces menos de lo que ha costado Ducati).
En 2007 Proton vendía Husqvarna a BMW (que se ha desprendido hace nada de ella), y para 2008, con problemas económicos propios y sin capacidad de inversión o reacción, MV Agusta (y Cagiva) pasaban a manos de Harley Davidson.
Poco le duraba a Harley Davidson la propiedad de MV Agusta. Con problemas económicos propios, e incapaz de reestructurar la compañía, volvía a vender en 2010 la compañía a... Claudio Castiglione. Sí, el fundador de Cagiva... Y se cerraba el círculo.
De 2010 a la actualidad los esfuerzos de MV Agusta han estado centrados en reorganizar la gama MV Agusta, y convertirla en una suerte de alternativa premium a las ya de por sí motos premium de Ducati. Así se decidió lanzar una versión tricilíndrica de menor cilindrada de la F4, y versiones "Naked" (Brutale), y la mixta Rivale.
Economica, industrial y estratégicamente, la compra no tiene lógica, pero aquí hay motivos de fondo que la justifican, y son personales
Las ventas respondieron, y MV Agusta, liberada de deuda en la liquidación de Harley Davidson (que se quedó los números rojos para ella), empezó a comenzar una modesta escalada. Pero necesita recursos para ampliar y renovar su gama.
Hace dos años se planteó una oferta pública de acciones, pero esta medida, que puede dar dinero a Castiglione, difícilmente puede ayudar a lograr financiación para la firma, que necesita poder contar con recursos para competir con los grandes grupos industriales a los que se enfrenta. Y es que Ducati, con el dinero de VAG a sus espaladas, y las gigantes niponas, se antojan demasiado fuertes para MV Agusta "sola".
En todo este escenario que te hemos contado, ¿cómo encaja Fiat?
Ciertamente, Fiat no necesita una marca de motos. Pero para Lapo Elkann, haberse quedado sin Ducati "le ha picado". De la misma manera que Castiglione quiso vengarse de la pérdida de Ducati con MV Agusta, Elkann podría querer "devolverle la estocada" a Piech y los suyos con la misma marca.
Y es que atendiendo a la situación económica de Fiat, endeudada y con proyectos, como el relanzamiento de Alfa Romeo, que necesitan de liquidez para ser llevados a cabo, parece incongruente que se vaya a meter en otro proyecto paralelo que consuma recursos.
Lapo Elkann quiso comprar Ducati para evitar que cayera en manos de VAG
Pero es que MV Agusta bien podría entrar dentro de la familia Agnelli sin pasar por Fiat, siendo invertida directamente desde Exor, el grupo que controla los intereses de los herederos de Giovanni, y que posee el 30% de Fiat.
MV Agusta podría ser, además, mucho más barata para Elkann y compañía. Por unos 60 millones de euros podrían tener un porcentaje con control de la compañía, y podrían ayudarla a conseguir una línea de financiación para sus proyectos, al tiempo que podría estrechar colaboraciones con las marcas prestacionales del Grupo Fiat (Ferrari-Alfa Romeo).
Y todo esto surge de rumores y más rumores que corren por Turín, que han contado en moto.it, y que nosotros hemos podido corroborar hoy mismo con nuestras propias fuentes.
¿Veremos la operación en marcha antes de que acabe el año? ¿supondrá algo positivo para MV Agusta? ¿y para Fiat? Es vuestro turno de opinión.