OJO, va tocho
Después de visitar varios concesionarios y pedir presupuestos, decidí escoger este concesionario ya que me hacían la mejor oferta. Estuve en contacto con Mekoloko para que me informara y me aconsejara acerca de lo que a él le había pasado, y a pesar de ello decidí seguir adelante. Al principio todo fueron amabilidades y buenas palabras, me pidió que diera una señal para que me pudiera reservar el coche (era uno que les iba a llegar para la exposición para cubrir el sitio de otro que acababan de vender). Cuando le pregunté el importe de la señal me dijo que ya que estaba que se lo pagara entero, cosa que por supuesto me negué a hacerlo. Además le insistí que no se lo pensaba pagar entero hasta que no viera como le quedaban los extras que le había pedido que me pusiera (lunas tintadas y pedales). Desde el momento que pagué la señal, comenzó a tomar unas confianzas que si bien al principio no les di importancia, en un par de ocasiones le tuve que decir que los comentarios que hacía estaban fuera de lugar. Estos comentarios estaban sobre todo referidos a mi pareja.
El comercial se marchó dos semanas de vacaciones y nada más volver, empecé a recibir mails de a ver cuando pensaba pagar, que ya tenía todo listo y que a ver a cuando estaba esperando. Me pasé a ver el coche y cuando le hacía preguntas acerca del coche se iba por la tangente. Me empecé a enfadar y hasta que no me enfadé, no empezó a darme respuestas claras. A las preguntas técnicas que le hacía no tenía ni idea y o bien me mentía o simplemente se quedaba callado (menos mal que gracias a este foro y a todos vosotros me he enterado de muchas cosas). A la hora de ir a hacer la transferencia, tuve problemas con el banco por temas de comisiones. Le llamé al comercial para decirle que tendría que esperar un poco. El tono y los modales del comercial cambiaron. Me empezó a decir, entre otras cosas, que si no se matriculaba a final de mes iba a tener problemas ya que no se iban a cumplir los cupos de matriculaciones, a lo cual le dije que ese era su problema. Coincidiendo con un puente me fui 4 días de vacaciones y la víspera por la tarde me llamó por lo menos 5 veces para saber como iba el asunto de la transferencia y pidiéndome que fueran mis padres o los padres de mi pareja al banco para solucionar el problema, a lo cual le dije que no me parecía adecuado que me pidiera que involucrara a terceras personas.
A la vuelta de mis vacaciones pude a hacer la transferencia y nada más hacerla, me empieza a llamar continuamente e incluso a mandar mensajes para decirme que cuanto antes tenía que cambiar de nombre el coche que entregaba a cambio (estaba a nombre de mi padre). Este dato ya lo conocía el comercial y él me dijo que con el libro de familia era suficiente. Hasta la semana siguiente no puedo hacer el cambio y casi a diario sigo recibiendo llamadas de a ver a que estoy esperando, que a ver que forma de hacer las cosas tengo, etc. Cuando fue fallo suyo el enterarse en el último momento.
Una vez hecho el cambio de nombre, me vuelve a llamar y me dice que necesita un certificado de hacienda de estar al día de las obligaciones fiscales. A lo cual le digo que me gustaría que se informara de todos los papeles necesarios y que no me los fuera pidiendo de uno en uno y él sigue diciéndome que eso no es asunto suyo, que todo es problema mío. Solicito el documento y mientras espero la llegada me llama diciéndome que ya tiene el coche matriculado y que pase cuando quiera. Cuando le pregunto por la necesidad del papel me dice que por lo visto no hacía falta (de lo cual ni me había avisado). Le pregunto si está a mi nombre el coche y su respuesta es: “Al mío si te parece”.
Con el coche ya matriculado, esa semana me vuelve a llamar varias veces preguntando cuando voy a ir a por el coche y con tono de impaciencia, como si no quisiera tener allí el coche. Cuando voy a recogerlo, me empieza soltar comentarios como: “has puesto a prueba mi paciencia”, “ la paciencia que debe tener tu novia” y cosas por el estilo. Yo le comento en que no me parece que sean formas el avisar de todo a última hora y las formas en las que se han hecho las cosas, a lo cual él me dice que desde el primer día me dijo que ya sabían cuales eran sus formas de trabajar. Le recrimino comentarios que me he hecho por teléfono y él me los niega diciéndome que nunca me había dicho eso. Empezamos a subir el tono y mi novia tiene que mediar en la discusión para no llegar a más. Al final me regala unas cadenas “por las molestias causadas” y la cosa termina más o menos calmada.
Perdón por el tocho, y si habéis llegado hasta aquí, gracias por leerme.
EN RESUMEN:
Precios majos, pero el comercial es una persona que puede llegar a ser muy desagradable y prepotente. Tiene conocimientos muy generales y poco precisos del vehículo. En cualquier pregunta algo técnica te das cuenta que no tiene ni idea del producto que vende.
MI CONSEJO Y EXPERIENCIA
No recomiendo este concesionario. Es mejor pagar algo más y ser atendido correctamente.