El progreso de Hyundai/Kia es impresionante.
Siempre me pareció que el papel de Nadal como prescriptor de Kia estaba no era demasiado creíble. No me lo imaginaba conduciendo los coches que anunciaba y, creo, no lo mostraban conduciéndolos, o al menos como como Nadal. Ahora, sí.
Y, además, resulta creíble.
Por cierto, el otro día ví un Alpine. Azul Francia. Y me decepcionó algo. Es cierto que lo vi, parado, a unos 8 metros de donde yo estaba y algo por encima de mi visual, y sin poder acercame más. Por tanto, cojamos con pinzas lo que afirmo.
Pero juraría que es más grande de lo que imaginaba. Y, además, su perfil, la menos hasta lo que sería el pilar B, me pareció bastante anodino, del mismo modo que la delantera me resultó menos evocadora y personal de lo que imaginaba. La trasera, sin embargo, sí me pareció lograda.
Repito, son impresiones que cojo con pinzas. Y no estoy diciendo que no sea un gran coche o que no sea bonito. Sólo que lo imaginaba más parecido al clásico 110 y, por tanto, con una personalidad más definida.
Sobre la publicidad. Creo que es como los cuchillos: pueden ser una herramienta utilísima -en la cocina, por ejemplo- o una arma mortífera. La publicidad puede servir para dar a conocer un producto o marca, mostrar sus cualidades, ofrecer motivos de compra -racionales o emocionales- y posicionarlo en el mercado. Pero también para engañar o manipular, desde luego.
Y es que, hoy en día, una campaña va mucho más lejos de los meros anuncios. No es publicidad sino comunicación bidireccional, cliente empresa...y controlar la tercera dimensión, la de los clientes o público en general. entre sí (este foro es un ejemplo). Una fase previa debe definir el producto con base en criterios de mercado. Y una vez qu se cuenta con ese producto, llega la publicidad. Y comprende todo tipo de canales: desde los anuncios tradicionales en prensa , TV, youtube, etc. -muy regulados- hasta marketing viral -RRSS, Foros, comentarios a noticias de prensa, todo ello sin regulación alguna o casi ninguna- o sitación del producto en determinadas series, programas, eventos, competiciones....
Y todo ello ha de hacerse de forma coherente, capaz de construir un relato y dando respuestas a las posibles dudas del cliente respecto a la marca o el producto. Y a largo plazo.
Es evidente que VAG sabe hacerlo muy bien. Tiene un excelente producto. Pero una no menos excelente estrategia de marketing e, incluso, una orientación de producto muy de mercado. Pasa lo mismo con Kia. No es casual esa publidad de VW, que trabaja la propia marca al tiempo que, sutilmente, desacridita a competidores como pueda ser a propia Kia.
Es evidnete que AR no hace buen marketing. Ni su producto está plenamente orientado al mercado (es más bien ingenieril) ni sus campañas de comunicación son demasiado coherentes, ni construyen imagen ni aciertan con un posicionamento creíble. Tampoco parecen dar respuesta a las dudas de muchos usuarios potenciales sobre la marca. Cuenta además con un problema adicional: AR es un producto italiano. Y la "marca Italia" está por los suelos. Ni Ferrari se libra del todo de ella. En cambio, la "marca Alemania" apunta mucho más alto.
Siempre me pareció que el papel de Nadal como prescriptor de Kia estaba no era demasiado creíble. No me lo imaginaba conduciendo los coches que anunciaba y, creo, no lo mostraban conduciéndolos, o al menos como como Nadal. Ahora, sí.
Y, además, resulta creíble.
Por cierto, el otro día ví un Alpine. Azul Francia. Y me decepcionó algo. Es cierto que lo vi, parado, a unos 8 metros de donde yo estaba y algo por encima de mi visual, y sin poder acercame más. Por tanto, cojamos con pinzas lo que afirmo.
Pero juraría que es más grande de lo que imaginaba. Y, además, su perfil, la menos hasta lo que sería el pilar B, me pareció bastante anodino, del mismo modo que la delantera me resultó menos evocadora y personal de lo que imaginaba. La trasera, sin embargo, sí me pareció lograda.
Repito, son impresiones que cojo con pinzas. Y no estoy diciendo que no sea un gran coche o que no sea bonito. Sólo que lo imaginaba más parecido al clásico 110 y, por tanto, con una personalidad más definida.
Sobre la publicidad. Creo que es como los cuchillos: pueden ser una herramienta utilísima -en la cocina, por ejemplo- o una arma mortífera. La publicidad puede servir para dar a conocer un producto o marca, mostrar sus cualidades, ofrecer motivos de compra -racionales o emocionales- y posicionarlo en el mercado. Pero también para engañar o manipular, desde luego.
Y es que, hoy en día, una campaña va mucho más lejos de los meros anuncios. No es publicidad sino comunicación bidireccional, cliente empresa...y controlar la tercera dimensión, la de los clientes o público en general. entre sí (este foro es un ejemplo). Una fase previa debe definir el producto con base en criterios de mercado. Y una vez qu se cuenta con ese producto, llega la publicidad. Y comprende todo tipo de canales: desde los anuncios tradicionales en prensa , TV, youtube, etc. -muy regulados- hasta marketing viral -RRSS, Foros, comentarios a noticias de prensa, todo ello sin regulación alguna o casi ninguna- o sitación del producto en determinadas series, programas, eventos, competiciones....
Y todo ello ha de hacerse de forma coherente, capaz de construir un relato y dando respuestas a las posibles dudas del cliente respecto a la marca o el producto. Y a largo plazo.
Es evidente que VAG sabe hacerlo muy bien. Tiene un excelente producto. Pero una no menos excelente estrategia de marketing e, incluso, una orientación de producto muy de mercado. Pasa lo mismo con Kia. No es casual esa publidad de VW, que trabaja la propia marca al tiempo que, sutilmente, desacridita a competidores como pueda ser a propia Kia.
Es evidnete que AR no hace buen marketing. Ni su producto está plenamente orientado al mercado (es más bien ingenieril) ni sus campañas de comunicación son demasiado coherentes, ni construyen imagen ni aciertan con un posicionamento creíble. Tampoco parecen dar respuesta a las dudas de muchos usuarios potenciales sobre la marca. Cuenta además con un problema adicional: AR es un producto italiano. Y la "marca Italia" está por los suelos. Ni Ferrari se libra del todo de ella. En cambio, la "marca Alemania" apunta mucho más alto.
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